Las auditorías energéticas tienen como función estudiar una instalación y buscar posibles problemas para poder solucionarlos aplicando los principios de la eficiencia energética.
Como hemos visto en un post anterior, las auditorías energéticas pueden ser de distintos tipos dependiendo del grado de profundidad con la que se estudie la instalación.
Desde simples reconocimientos visuales de la instalación identificando los problemas más graves, hasta estudios muy profundos  con un grado de detalle tal, que permite controlar todo tipo de factores que pueden estar afectando al correcto funcionamiento de la instalación.
Este tipo de estudios se llevan a cabo mediante sistemas avanzados de auditoría energética, como son los Sistemas de Gestión de la Energía (SGEs), que permiten controlar completamente la instalación mediante herramientas adecuadas.
Un buen ejemplo de este tipo de sistemas es SEINON (Sistema Energético INtegral Online). Este sistema se instala en la instalación objeto de estudio y permite estudiarla en profundidad monitorizando de forma continua para recopilar multitud de datos con los que poder analizar todos los factores que estén afectando al correcto funcionamiento de la instalación.
También tiene una función muy útil con la que podemos detectar anomalías de la instalación en el momento que se producen mediante alarmas programadas de antemano.
Además tiene un sistema de asesoría energética que lo hace mucho más efectivo como herramienta para realizar auditorías energéticas, pues a partir de los datos recogidos detecta los problemas existentes y propone las mejores soluciones posibles.
En lo sucesivo iremos viendo cómo aplicar este tipo de sistemas para realizar de manera más efectiva las auditorías energéticas.